Hidral y el Banco de Alimentos de Sevilla han formalizado un convenio de colaboración que refuerza la alianza entre el ámbito empresarial y el sector social, con el propósito de seguir combatiendo el desperdicio alimentario y apoyar a las personas en situación de vulnerabilidad. Este acuerdo supone un nuevo paso en la cooperación entre ambas entidades, impulsando la solidaridad, la sostenibilidad y el aprovechamiento responsable en la provincia de Sevilla.
El acto de firma se celebró en la sede del Banco de Alimentos de Sevilla y contó con la presencia de Florencio Chacartegui, CEO de Hidral, así como de Leopoldo Parias, presidente del Banco de Alimentos de Sevilla, y José Pérez, responsable del Área de Captación de Recursos. Durante el encuentro, se destacó la importancia de fortalecer los lazos entre el tejido empresarial y las organizaciones sociales.
A través de este compromiso, Hidral demuestra que la implicación empresarial es un elemento esencial para generar impacto positivo en el entorno y contribuir al bienestar colectivo.
El convenio contempla una aportación económica por parte de Hidral destinada al cumplimiento de los fines fundacionales del Banco de Alimentos de Sevilla, garantizando la continuidad de sus programas de recogida, almacenamiento y distribución de alimentos a entidades colaboradoras. Asimismo, el acuerdo incluye acciones de voluntariado corporativo, por el que las personas trabajadoras de Hidral podrán participar directamente en las labores de la fundación. A raíz de esta alianza, ambas organizaciones pondrán en marcha una línea de actuación conjunta, orientada al desarrollo de proyectos que fomenten la conciencia social, la sostenibilidad y la implicación de la ciudadanía en la lucha contra la pobreza alimentaria.
La colaboración entre Hidral y el Banco de Alimentos de Sevilla es un claro ejemplo de Responsabilidad Social Corporativa (RSC), en tanto refleja la apuesta de la empresa por integrar valores éticos, sociales y sostenibles en su gestión. A través de este compromiso, Hidral demuestra que la implicación empresarial es un elemento esencial para generar impacto positivo en el entorno y contribuir al bienestar colectivo. Iniciativas como esta ponen de manifiesto que la solidaridad y la sostenibilidad son pilares fundamentales para construir una sociedad más justa, equitativa y comprometida con las personas y el planeta.
 
  
 
 
  
 